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¿Qué es el envejecimiento de la piel y por qué se produce?
El envejecimiento de la piel se produce tanto por factores internos como externos. Uno de los factores internos más relevantes que afectan la velocidad del envejecimiento, es el estrés oxidativo. Se trata de un deterioro celular que se produce cuando se liberan radicales libres en nuestro organismo, unas moléculas inestables y reactivas que atacan a otras células en busca de su propia estabilidad, llegando incluso a dañar el ADN. Por eso se les conoce como los mayores responsables del envejecimiento de la piel porque deterioran el tejido celular haciendo que se debilite y envejezca.
En este contexto, el envejecimiento de la piel es una acumulación de daños moleculares producidos principalmente por las especies reactivas que mencionamos anteriormente, pero también existen factores externos que lo aceleran. Entre ellos la exposición a los rayos UV, hábitos poco saludables, estrés, contaminación ambiental, humo de cigarro, alcohol y más. Como consecuencia, existe una pérdida progresiva de la elasticidad de la piel viéndose afectada la síntesis de colágeno, elastina y ácido hialurónico, componentes que desarrollamos de manera natural en nuestro organismo para mantener una piel firme y saludable.
Una piel envejecida y dañada se renueva más lento, se vuelve más delgada y pierde solidez. La actividad de las glándulas sebáceas también disminuye y la piel tiende a secarse, es decir, pierde el equilibrio entre sus componentes lipídicos y acuosos. A medida que vamos avanzando en edad, muchos órganos y procesos internos se debilitan y dejan de funcionar correctamente.
La buena noticia es que existen diversos métodos para mejorar una piel envejecida o prevenirla frente a la oxidación. Uno de ellos son los antioxidantes porque nos defienden de la principal amenaza del deterioro celular, pero antes de hablar de ellos, profundicemos un poco sobre los radicales libres.
¿Qué son los radicales libres y por qué dañan la piel?
Son moléculas de oxígeno inestables debido a la pérdida de un electrón y, por lo tanto, altamente reactivas. Donde hay oxígeno, ellos existen. Los inhalamos cuando respiramos e incluso, se producen de manera natural en nuestro cuerpo a partir del propio proceso químico del metabolismo. La misión de estos radicales libres es tomar el electrón que les falta para recuperar su estabilidad y en este camino dañan muchas células, dificultando el proceso de regeneración y reproducción celular. Según el naturópata español Antonio Bernales, en su libro “Radicales Libres y Antioxidantes”, cuenta que el ADN de cada célula es golpeado unas 10.000 veces cada día por radicales libres. Por eso la importancia de los antioxidantes tanto por vía tópica como por vía oral, para contrarrestar estos golpes y por lo tanto, el envejecimiento acelerado.
Si bien, no es posible erradicar los radicales libres, sí podemos neutralizarlos de manera constante. Aquí entra el rol fundamental de los antioxidantes.
¿Qué son los antioxidantes y cómo actúan contra el envejecimiento?
Antioxidante viene de anti: contra, oxidante: oxidación. A modo general, son ingredientes que evitan la oxidación de las células, por ende, retrasan el envejecimiento de la piel y la mantienen en buen estado, luminosa, juvenil y saludable. Como explica Bernales en su libro, “los antioxidantes funcionan donando electrones con lo que evitan que los radicales libres los roben de nuestras células”.
En condiciones normales, en el organismo tenemos un equilibrio entre la formación de radicales libres y su neutralización. Nuestro cuerpo posee mecanismos biológicos para desactivarlos. Sin embargo, por diversos factores externos que mencionamos en un comienzo, es posible que nuestra reserva de antioxidantes natural sea incapaz de neutralizarlos a todos. Dado esto, nos hemos visto obligados a aplicar una dosis de refuerzo con antioxidantes tópicos. Esta es una de las razones por las cuales elaboramos nuestro Sérum Antioxidante, un ultra concentrado que contiene Vitamina C estabilizada al 10%, Maqui Orgánico, Resveratrol, Ácido Ferúlico, Vitamina E, entre otros que además de proteger la piel de los radicales libres, regeneran y otorgan luminosidad a la piel.
Para entender mejor el comportamiento de un antioxidante, pondremos el ejemplo de la Astaxantina, el rey de los carotenos y uno de los compuestos más poderosos contra el envejecimiento. Gracias asu estructura de cadena larga de 13 doble enlaces, tiene la capacidad de regalar muchos electrones a los radicales libres permitiendo que se estabilicen. Existen diversos estudios que avalan su eficacia contra el estrés oxidativo.
Las algas y plantas con propiedades antioxidantes tienen en común, que en su lucha contra el daño de los rayos UV y otros factores externos como patógenos, insectos y radicales libres que los atacan en su ciclo de crecimiento, desarrollan un particular pigmento de color rojo que las protege del estrés oxidativo. Esas mismas propiedades protectoras y antioxidantes que desarrollan vida a modo de defensa, son las que luego aplicamos en nuestra piel para protegernos de las mismas amenazas.
Los tres productos de la familia CELIV contienen poderosos antioxidantes para retrasar el envejecimiento de la piel y mantenerla saludable. ¡No esperes más para probarlos! Verás un cambio notorio en tu piel.
Gracias a la ciencia y sus descubrimientos se conocen nuevos datos que comprueban la relación entre la alimentación y una piel saludable; y por lo tanto se ve que hay solución para disminuir el acné o mantenerlo bajo control ¡Más detalles en este artículo!
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